domingo, 22 de noviembre de 2009

Los últimos serán los primeros.

Me he despedido desde que ésto partió, la vida, desde el inicio nos comenzamos a morir y es el miedo que todos guardamos en nuestros corazones: La muerte.
La muerte representa el fin. El fin de las acciones, del objetivo, de una relación.
Un último adios, un último beso, un último abrazo..No son más que un esfuerzo por continuar abrazando,por continuar besando, por decir hola otra vez.
El último nunca es el fin, sino que el comienzo de algo, ya que si de verdad se quisiera dar muerte, simplemente se asesina, no se da el tiempo para vivir antes de la muerte.
Dada esta curiosidad humana, he aprendido que con los últimos siempre habrá un nuevo despertar, ya que existe el anhelo por continuar, por dar a entender que será el último y poner la gota dramática que desata la tortura, no muerte, y la ansiedad del otro por decir NO.
Si no existieran los últimos, nunca habría primeros. Pero, paradójicamente, los últimos que uno persigue nunca son los últimos reales.
Talvez fue un último beso, pero ¿Cómo saber si esa persona no te sigue besando en sus sueños?
Al final, lo único que queda por descubrir, es si algún día la primera despertará bruscamente al sospechar que la estaban besando, buscará un auto e irá en busca de un nuevo último, que por lo general pasa a ser un nuevo primero.
Como verán, soy una loca de mierda.